Chapter 240
Capítulo 240
Matías parecía haberse quedado congelado en la puerta, ya ni recordaba la última vez que lo había visto.
“Llegaste, ¿y Refugia?”
Al oír mi pregunta, frunció el ceño ligeramente, probablemente no esperaba que lo primero que le preguntara no fuera cómo estaba, sino por mi antigua archienemiga Refugia.
“Ella no pudo venir, se fue con Valentina a Montaña de los Místicos“.
Di un paso atrás para dejarlo entrar, pero él no dio el paso: “Norma, te ayudaré en esto, aunque sea para compensar por lo que hice mal en el pasado“. Mientras hablaba, sacó un celular de su bolsillo: “Este teléfono es nuevo, al igual que el número. Guardé mi contacto y el de Refugia, y también el de mi tío. Solo prepárate porque mi tío por ahora no está localizable“.
Sentí un nudo en el estómago, como si algo dentro de mi se desmoronara.
“No te preocupes, Jeremías ya fue a Canto de Río a buscarlo. La familia Hoyos, por alguna razón, se enteró de que mi tío fue a Canto de Río y planean tener una junta de accionistas mañana. Yo protegeré los intereses de la familia Hoyos por él“.
Siempre había sido inquebrantable ante las adversidades, excepto en lo que a mí respectaba, donde solo confiaba en Refugia. Pero con cualquier otro asunto, era capaz de analizar la situación con claridad y actuar con precisión.
Por eso no me preocupaba que tuviera problemas al ayudar con el Grupo Hoyos.
Si él prometía hacer algo, lo cumplía.
Tomé el teléfono pues era la oportunidad perfecta para ver si había alguna vigilancia que no había detectado.
Samuel seguramente vendría si sabía que tenía un teléfono.
Matías tenía sus razones para no entrar, probablemente porque incluso los abogados podían ser precavidos y detectar algo sospechoso.
Por qué si no, Refugia había sido llevada por Valentina justo después de verla anoche.
“Matías, mantén un ojo en Refugia, me preocupa que Valentina pueda lastimarla“.
Sabía que involucrarlos era demasiado, después de todo, ellos no tenían nada que ver con esto.
Pensé egoístamente que me debían algo desde una vida anterior.
“¿No tienes nada que decirme, Norma?” Matías de repente miró al suelo con una expresión de resignación y luego me miró forzando una sonrisa.
En todos los años de conocerlo, nunca lo había visto forzar una sonrisa en su rostro indiferente.
“Matías, lo que más quiero saber es si Gonzalo está bien, no he podido contactarlo en todo el día“. Dije sinceramente, y no pude evitar sentir un nudo en la garganta, mirándolo con los ojos llorosos.
En ese momento, mi mente y mi corazón estaban completamente ocupados por Gonzalo. Exclusive © material by Nô(/v)elDrama.Org.
Al igual que cuando amaba a Matías, pero ahora con más razón y control.
“Matías, ten cuidado“. Cerré la puerta, no quería que se quedara demasiado tiempo, porque no sabía si Samuel descubriría que Matías también estaba involucrado.
Podía usar a todos aquellos que él pensaba que eran mis enemigos.
Caminé por la casa con el teléfono, fingiendo hacer una llamada, solo para ver cuánto tardaría Samuel en
encontrarme.
Como esperaba, media hora después, sonó el timbre de mi puerta.
08.55
Capítulo 240
De repente, me sentí triste.
Si Samuel tenía vigilancia en mi casa que aún no había descubierto, entonces también debía haber visto cómo anoche me había quedado mirando su espalda herida y ensangrentada sin hacer nada.
¿Por qué entonces seguía siendo amable conmigo, solo porque me había cuidado como a una hermana durante años?
Pero él también había cuidado a muchas otras chicas en el orfanato durante años.
Abrí la puerta y vi a Samuel con la cena en la mano: “No desayunamos juntos esta mañana, ¿qué tal si tomamos algo esta noche?”
Con una sonrisa, toqué mi vientre y dije: “Estoy embarazada“.